martes, 26 de febrero de 2008


Si de algo he de estar agradecida, es del privilegio de poder disfrutar de la naturaleza y con la naturaleza, es que el regalo más lindo que nos puede dar la vida es lo que nos provoca el sentir la brisa del aire, el olor a vida, el saber cuantas sorpresas pueden aparecer si te internas en un bosque, cuanta vida puedes encontrar... Pero soy conciente de que no todos valoran eso, y me incluyo.
Falta conciencia, más allá de las construcciones que rodean nuestros hogares, hay seres vivos que aunque no lo tomemos en cuenta nos ayudan a vivir...
Respecto a la foto es en el Río Manso en Bariloche.
Inga Monserrat,